Roberto Lertxundi, ex-etarra, presidente del mayor abortorio del País Vasco y senador socialista votará el proyecto de Ley del Aborto el 24 de febrero en el Senado

 

Cuando la política y los intereses económicos van de la mano podemos esperar lo peor. Ya no es política, servicio a los ciudadanos, son negocios. Una ministra, González Sinde, concede generosas subvenciones al cine español, negocio en el que ella tiene importantes intereses. Ahora, Roberto Lertxundi, ex-etarra, fundador y presidente de la Clínica Euskalduna –que es el mayor abortorio del País Vasco-, participará como senador del PSE-PSOE en la votación del miércoles 24 de febrero sobre el Proyecto de Ley del Aborto.

"Es éticamente inaceptable que un empresario del aborto pueda decidir sobre el futuro de su negocio. Es aberrante la sola posibilidad de que alguien que se enriquece con el aborto tenga en sus manos el poder de decidir sobre la vida de cientos de miles seres humanos y la salud de las mujeres, nada menos que en la Cámara de la soberanía nacional.

El sistema parlamentario español no merece caer tan bajo. Si al PSOE le queda algo de decencia en este asunto, debe pedir hoy mismo a su senador y empresario del aborto que no participe en la votación del próximo miércoles. (…)

Esta ley se ha hecho para satisfacer a la industria abortista, para darle un cheque en blanco a su violencia contra la vida humana y contra las mujeres. Es evidente que los empresarios del aborto han estado en todo el proceso, primero en el Comité Aído y luego en la subcomisión parlamentaria, y es evidente que ahora pretenden ser decisivos por medio de su peón en el Senado, el señor Lertxundi. Por respeto a la independencia de la democracia española, debemos denunciarlo e intentar impedirlo por todos los medios legales a nuestro alcance." (Gádor Joya, portavoz de Derecho a Vivir)

No cabe duda de que cuando se conozcan -cuestión de tiempo- los entresijos de la aprobación de esta ley, saldrá mucha basura. Para entonces más de uno/a se habrá enriquecido a costa del sufrimiento de muchos/as.

Por otra parte, don José Bono que cobra su sueldo como Presidente del Senado (institución representativa de todos los españoles) pagado con los impuestos de todos los españoles, no se ha dignado recibir a miembros de Derecho a Vivir cuando iban a entregarle más de un millón de firmas en apoyo de la vida y en contra del proyecto de ley del aborto.

¡Qué adecuada sería aquí la frase escrita por Jovellanos hace más de doscientos años en la prisión de Bellver a propósito de los derechos ilegislables: